Gustavo Saadi tiene el tupé de criticar a Milei mientras Catamarca sufre y su apellido sigue atado a la corrupción

El intendente Gustavo Saadi cuestionó a Javier Milei en la apertura de sesiones 2025, pero ignora la crisis de Catamarca y la oscura historia de su familia en la provincia.

Política 02/03/2025Redacción Realidad CatamarcaRedacción Realidad Catamarca

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Gustavo Saadi Intendente
Gustavo Saadi Intendente

El intendente de San Fernando del Valle de Catamarca, Gustavo Saadi, inauguró el período de sesiones ordinarias 2025 con críticas al gobierno nacional, cuestionando las políticas de ajuste de Javier Milei. "No creemos que la solución sea una motosierra, nosotros creemos en construir y no en destruir", afirmó en su discurso. Pero, ¿de qué construcción habla? ¿Acaso no es su familia la que llevó a Catamarca a décadas de estancamiento, corrupción y falta de oportunidades?

Hablar de los Saadi en Catamarca es recordar un pasado marcado por el nepotismo y la impunidad. Desde la década de 1980, el apellido Saadi ha sido sinónimo de un poder político que gobernó la provincia como un feudo personal. La familia estuvo en el centro de uno de los episodios más oscuros de la historia local: el asesinato de María Soledad Morales en 1990, un crimen que destapó la corrupción y el abuso de poder en la provincia, obligando al gobierno nacional a intervenir Catamarca.

El texto del párrafoCatamarca en emergencia económica: la herencia del despilfarro peronista y la falta de responsabilidad

Ahora, en 2025, Gustavo Saadi repite la misma fórmula de siempre: discursos grandilocuentes, promesas de inversión y anuncios de proyectos que nunca terminan de materializarse. Esta vez, presentó la instalación de 300 cámaras de seguridad, violencia de género, la construcción de un Centro de Diagnóstico Municipal y la renovación de plazas y veredas. Sin embargo, los ciudadanos se preguntan: ¿qué pasó con las obras anteriores? ¿Por qué la inseguridad sigue en aumento?

Mientras Milei lucha por sanear el desastre económico heredado, Gustavo Saadi se posiciona en la vereda opuesta, criticando la restauración nacional y defendiendo un modelo de gestión que ha dejado a Catamarca relegada en el desarrollo nacional. En lugar de sumarse al cambio que el país votó de forma contundente, Saadi sigue aferrado a las viejas prácticas de la política tradicional, donde el clientelismo y la demagogia son la única estrategia.

Catamarca merece un gobierno que realmente escuche a sus ciudadanos y trabaje para el futuro, no un intendente que antepone sus intereses políticos a las verdaderas necesidades del pueblo. ¿Seguirán los catamarqueños tolerando esta forma de gobernar?

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