Catamarca fue grande y volverá a serlo

Un editorial que rompe con la comodidad y denuncia cómo el populismo hundió a Catamarca en la miseria planificada. Un grito visceral que recuerda el pasado glorioso de la “Atenas del Norte” y convoca a despertar la provincia dormida. No busca agradar, busca incomodar. Es el inicio de una rebelión de ideas y orgullo catamarqueño.

Te lo digo yo18/08/2025Redacción Realidad CatamarcaRedacción Realidad Catamarca

Empresa Fúnebre Viviana Nieto

Catamarca grande
Catamarca grande

Catamarca no siempre fue lo que es hoy. Antes de los punteros, los planes y el populismo, esta provincia era otra cosa. Nos llamaban “la Atenas del Norte” porque acá se pensaba. Se discutía. Se enseñaba. Se leía. Se creaban ideas. No éramos un feudo más. Éramos una cuna de cultura, civismo, fe y libertad.

Nuestros próceres no fueron burócratas ni militantes pagos. Fueron hombres de convicción, de palabra y de acción. Fray Mamerto Esquiú, el orador de la Constitución, que predicó con la cruz en una mano y la ley en la otra. Vicente García, jurista brillante y patriota. Ramón Berrondo, que escribía y educaba. Gregorio Navarro, político católico que enfrentó la tiranía. Emilio Riu, que trajo pensamiento moderno sin abandonar las raíces. Todos ellos, catamarqueños. Todos ellos, olvidados a propósito.

¿Y qué nos pasó? Llegó el populismo. Nos compraron con miseria. Nos callaron con miedo. El kirchnerismo, el peronismo, el radicalismo, todos jugaron su parte. A la Atenas del Norte la convirtieron en un campo de concentración con planes y bolsones. Nos acostumbraron a mendigar. A vivir de lo mínimo. A no esperar nada. Y lo peor, a no recordar lo que fuimos.

Pero esa Catamarca no murió. Está dormida. Silenciada. Oculta. Y ahora está despertando. 

Yo no escribo para que me aplaudan.
Escribo porque me harté.

Porque me duele ver a Catamarca de rodillas mientras los mismos de siempre reparten miseria y se reparten el poder.
Porque me da asco ver cómo nos quieren mansos, callados, anestesiados.
Porque yo sé lo que esta provincia fue. Y me niego a aceptar que esto sea todo lo que puede ser.

Escribo porque alguien tenía que decirlo.
Y si no lo dice nadie, te lo digo yo.

No es momento de agradar, es momento de incomodar.
De romper el relato. De abrir los ojos.
De sacudir esta tierra dormida.

Yo quiero ver a Catamarca despierta, fuerte, libre.
Yo quiero ver a Catamarca grande.
Y sé que no soy el único.

Empresa Fúnebre Viviana Nieto

Aviso-Ambiente-Controlado